Rompiendo el prejuicio: una peruana que se abre paso en el mundo de la ciencia | canalipe.tv

Tecnología · 21 de Sep 2016

Rompiendo el prejuicio: una peruana que se abre paso en el mundo de la ciencia

A propósito del concurso "Mujeres por la ciencia" te contamos un poco más del rol de la mujer peruana en la ciencia.

Rompiendo el prejuicio: peruanas que se abren paso en el mundo de la ciencia

Canal IPe

Una de las científicas peruanas jóvenes que más ha dado qué hablar es Mónica Abarca, una chica de 25 años que, con esfuerzo y creatividad, aporta con sus innovaciones tecnológicas a la sociedad desde la ingeniería mecatrónica mediante el uso de drones. Desde niña nunca le ha tenido miedo al qué dirán y siempre se ha atrevido a hacer lo que ha querido. Por ejemplo, siempre ha tenido gustos que no suelen ser percibidos como tradicionales en las mujeres, como el fútbol y los videojuegos,que no le gustaban a sus primas, sino a sus primos, con quienes compartía mucho más tiempo.

 

“Cuando crecí eso me permitió estar en un entorno como la universidad, en donde también habían más hombres, pero no me sentía intimidada por eso”.

 

Al ingresar al colegio se dio cuenta que le gustaban más los números que las letras. “Desde pequeña siempre fui muy curiosa con el entorno. Me gustaba saber cómo funcionaban las cosas. No me gustaban las respuestas simples”. Al postular a la universidad esto definió su interés para estudiar ingeniería y no ciencias básicas, ya que esta le permitiría aplicar la teoría a la práctica.

 

A pesar de que en su especialidad solo estudiaban dos mujeres, Mónica comenta que nunca sintió el rechazo de sus compañeros. No solo eso: tampoco se dejó intimidar por estar en minoría. Obtuvo el primer puesto general de su promoción. Y, en el 2013, su dedicación rindió frutos cuando fue convocada a participar en “The Mars Society”, un proyecto internacional de profesionales y estudiantes que busca investigar y desarrollar medios innovadores para poder llevar seres humanos a Marte. En esa edición, realizada en el desierto de Utah tuvo el primer contacto con el trabajo de sus sueños, la NASA.

 

Otro de sus logros es haber fundado la empresa qAIRa, basada en el proyecto de investigación por el que obtuvo su licenciatura. Este consiste en un dron que detecta los niveles de contaminación del aire para poder realizar un análisis y monitoreo. Su invención  ha sido reconocida por su posibles aplicaciones en el campo de la minería, ya que permitirá obtener datos más fiables en áreas más extensas a un menor costo. Además, el 2015, su innovación fue reconocida con el primer puesto en la Competencia de Impacto Global - Perú, por la que fue merecedora de una beca en la Universidad Singularity.

 

 

Compartir en: