De pequeños ciclistas a grandes ciudadanos

Poco a poco la bicicleta va dejando de ser solo un juguete con el cual salir a pasear para convertirse en una alternativa de transporte sostenible. Además de ser un gran ejercicio, usar una bicicleta para ir a trabajar o estudiar también nos hace ciudadanos más responsables al cuidar el medio ambiente y nuestros espacios públicos, algo que podemos ir enseñándole a los chicos desde muy pequeños.

“La formación de ciclistas en edad infantil permite a los niños no solo aprender a maniobrar una bicicleta, sino también a desarrollar una cultura ciclista que permita crear ciudades más vivibles y sostenibles lo que, a su vez, hará que puedan desplazarse en la ciudad con independencia y seguridad”, nos cuenta Nilton López, Gestor de Movilidad Sostenible de la Municipalidad de San Isidro.

Con el objetivo de impulsar esta cultura, es que se viene ejecutando el programa “Minibikers”, una iniciativa que les enseña a niños y niñas entre los tres y cinco años a incursionar en el uso de la bicicleta para que sea una lección que les dure para toda la vida.

Aprendiendo y desarrollando

Para lograr que niños tan pequeños aprendan a controlar su equilibrio y velocidad, el programa realiza sus talleres con bicicletas sin pedales, su primer gran paso en este mundo ciclista.

Las bicicletas sin pedales les permiten controlar su equilibrio y velocidad de manera natural ya que pueden balancearse sin ningún riesgo mientras se van familiarizan con ellas. Según explica Nilton, con este método los chicos también “fomentan su habilidad psicomotora y mejorar el sentido de orientación”; todo esto, mientras se divierte y disfruta de su autonomía e independencia.

“Una vez que el pequeño ha adquirido seguridad en su bicicleta sin pedales, llegará el momento de pasar a una bici con pedales ajustada a su altura – resalta Nilton –. La metodología usada nos permite que cada niño pueda adquirir su propia capacidad”.

Efecto replicador

Los talleres también contemplan capacitaciones a los docentes pues son ellos los que acompañan a los chicos en su proceso de aprendizaje. Hasta el momento han realizado tres charlas para instructores dirigido a profesores, padres y entusiastas de la bicicleta con material especializado.

Mediante este programa ya han capacitado a más de 15 instructores que visitan los colegios del distrito y que además dictan talleres en varios parques públicos. La comunidad sigue creciendo y también se involucra con otros programas que permite una educación “ciclista” más continua, orientada a escolares más grandes, adultos, familias y ciclistas aficionados.

A cada pedaleo se van cosechando los grandes cambios que veremos en el futuro. ¿Conoces de otra iniciativa que fomente el ciclismo en tu comunidad?